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Resulta difícil encontrar sentido a un texto cuando las palabras no están escritas correctamente. Escucha el audio y compruébalo. Después revisa la ortografía del texto. Da clic en las palabras subrayadas para que veas en cada caso la fundamentación de las correcciones ortográficas.
Amarillo: Cambios de acentuación que modifican el sentido de la palabra.
Azul: Palabras homófonas (palabras que suenan igual pero se escriben y tienen un significado diferente.
Verde: Palabras mal escritas.
Ahora revisarás la cohesión y coherencia del texto, las correcciones y el texto final. Si te quedaron claras las modificaciones en el texto, da clic en "Realizar cambios" y después en "Siguiente cambio" para continuar. Veamos primero cómo queda el texto sin faltas de ortografía y acto seguido vayamos realizando cambios para que se torne más claro y ordenado. Las palabras en letras rojas nos indican repeticiones innecesarias que se corrigen al modificar la sintaxis o mediante el uso de sinónimos.

"El búho vidente"

Fue en una excursión que hizo el colegio para conmemorar que terminábamos la primaria, cuando compré el pequeño búho con el cuerpo azul, la cabeza y las patas blancas y los ojos negros. No mide más 5 centímetros. Mis compañeros fueron a una tienda de artesanías y yo me quedé conversando con un viejo pescador que vendía esas figuras como de cera. Le pregunté si además de adorno servianservían para otra cosa y respondió que esos búhos predisenpredicen el tiempo, yo me le quede mirando poco convencido de lo que me decia me dijo que estaba viejo y ya no podía salir a pescar pero que fabricaba esos búhos porque a él uno le había servido para informarle del estado del tiempo cuando salia a pescar y si su cuerpo se quedaba azul era que iba a estar soleado, si se tornaba color crema indicaba que iba a estar nublado y si se tornaba rosa pálido eso indicaba que habría tormenta, o incluso amenaza de ciclón. Fue durante una excursión que organizó el colegio para celebrar que terminábamos la primaria, cuando compré el pequeño búho con cuerpo azul, cabeza y patas blancas y ojos negros. No mide más 5 centímetros. Mis compañeros fueron a una tienda de artesanías y yo me quedé conversando con un viejo pescador que vendía esas figuras como de cera. Le pregunté si además de adorno servían para otra cosa y respondió:

 - Sí, estos buhitos predicen el tiempo. Ante mi mirada dudosa agregó:
  - Ya estoy viejo para salir a pescar, pero durante años tuve uno que era mi guía para saber si me embarcaba o no. ¿Ves el azul de su cuerpo? Pues bien, si permanece de ese color, el día estará soleado; si se torna color crema, estará nublado y si de plano se pone rosa pálido, anuncia tormenta.

Aunque no le creicreí del todo, la figura me resultó plástica y graciosa y la compré a cambio de algunas monedas, luego subimos al autobús y lo guardé y al llegar a casa lo saqué de la mochila de viaje y se los regalé a mis padres. Mi mamá observó que estaba muy gracioso, pero que no quedaba con la decoración de la casa. A mi papá le encantó y más cuando le narré la historia que me habían contado sobre sus propiedades meteorológicas. Mi papá lo tomó y lo colocó en el marco de la ventana cerca de un escritorio donde “hacía cuentas” para los pagos de la casa. Pasaron los días y tal como me había dicho el viejo pescador el búho cambiaba de color de acuerdo al estado del tiempo por lo que azul equivalía a soleado, crema, haa nublado y rosa si iba a llover. Aunque no le creí del todo, la figura me resultó artística y graciosa. La compré a cambio de algunas monedas. Subimos al autobús y lo guardé.

Al llegar a casa lo saqué de la mochila de viaje y se los regalé a mis padres. Mi mamá observó que estaba muy gracioso, pero que no quedaba con la decoración de la casa. A mi papá le encantó y más cuando le narré la historia que me habían contado sobre sus propiedades meteorológicas. Mi papá lo tomó y lo colocó en el marco de la ventana cerca de un escritorio donde “hacía cuentas” para los pagos de la casa. Pasaron los días y tal como me había dicho el viejo pescador el búho cambiaba de color de acuerdo al estado del tiempo por lo que azul equivalía a soleado, crema, a nublado y rosa si iba a llover. Al llegar a casa, lo saqué de la mochila de viaje y se los regalé a mis padres. Mi mamá observó que estaba muy gracioso, pero que no quedaba con la decoración de la casa. A mi papá le encantó y más cuando le narré la historia que me habían contado sobre sus propiedades meteorológicas. Mi padre lo colocó en el marco de la ventana cerca de un escritorio donde “hacía cuentas” para los pagos de la casa. Pasaron los días y, tal como me había dicho el viejo pescador, el búho cambiaba de color de acuerdo al estado del tiempo por lo que azul equivalía a soleado, crema a nublado y rosa si iba a llover fuerte, o incluso podría tratarse de una amenaza de ciclón.

anterior Había una vez

Un día mi mamá llegó más temprano por mí a la escuela, tenía la cara hinchada y los ojos llorosos y nos fuimos directo al hospital pues a mi papá le había dado una embolia. No nos permitieron permanecer en el hospital y de regreso a la casa me sorprendió que el búho estuviera de color azul marino, confieso que me asusté, casi no dormí. Un día mi mamá llegó más temprano por mí a la escuela. Tenía la cara hinchada y los ojos llorosos. Nos fuimos directo al hospital pues a mi papá le había dado una embolia. No nos permitieron permanecer. De regreso a la casa me sorprendió que el búho estuviera de color azul marino. Confieso que me asusté. Casi no dormí.

Al día siguiente antes de ir al hospital me asomé al pequeño despacho y el búho estaba color crema, como siempre que los días iban a estar nublados. Por suerte, mi papá se salvó y se fue recuperando lentamente y estuvo bien por un tiempo. Al día siguiente, antes de ir al hospital, me asomé al pequeño despacho y el búho estaba color crema, como siempre que los días iban a estar nublados. Por suerte, mi papá se salvó y se fue recuperando lentamente y estuvo bien por un tiempo.

Hace dos semanas mi papá recayorecayó, los médicos no nos dieron explicación y dijeron que requería reposo, mi padre sin embargo se levantaba y arreglaba sus papeles y a ratos dormía y sonría. Ayer murió en la noche y en la mañana él me había asegurado que estaba tranquilo. El búho lleva casi dos días amarillo, un amarillo canario. Hace dos semanas mi papá recayó, los médicos no nos dieron explicación y dijeron que requería reposo, mi padre, sin embargo, se levantaba y arreglaba sus papeles y a ratos dormía y sonría. Ayer murió en la noche y en la mañana él me había asegurado que estaba tranquilo. El búho lleva casi dos días amarillo, un amarillo canario.

No hay correcciones ortográficas
ORTOGRAFÍA COHESIÓN Y COHERENCIA
Cerrar
servían
De servir. Dicho de un instrumento o de una máquina: Ser a propósito para determinado fin. Conjugación en copretérito del indicativo en tercera persona del plural. Se acentúa en la "i".
Esas tijeras servían para cortar el pelo, ahora les falta filo.
predicen
De predecir. Anunciar por revelación, ciencia o conjetura algo que ha de suceder. Conjugación en presente del indicativo en tercera persona del plural. Se escribe con “c” (como "decir").
Hay quien cree que los horóscopos predicen el futuro.
creí
De creer. Pensar, juzgar, sospechar algo o estar persuadido de ello. Conjugación en primera persona del singular en pretérito del indicativo. Se acentúa en la "i".
Creí que habías llegado, pero fue un ruido en el departamento de arriba.
a
Preposición. Precede a determinados complementos verbales, como el complemento indirecto y el complemento directo cuando este es de persona determinada o está de algún modo personificado.
La luz roja del semáforo equivale a alto.
ha
Tercera persona del singular del presente del indicativo del verbo haber.
Lucas ha anunciado que pronto se casará.
recayó
De recaer. Dicho de quien estaba convaleciendo o había recobrado ya la salud: Caer nuevamente enfermo de la misma dolencia. Conjugación en pretérito del indicativo en tercera persona del singular. Se acentúa en la "o".
Había superado la enfermedad, pero recayó.

X
Correcciones de cohesión y coherencia
Texto final
X
Cohesion

La cohesión es la propiedad del texto que hace que los elementos que lo componen tengan una correcta relación sintáctica y semántica.
Coherencia

Coherencia es la propiedad que tiene un texto cuando se presenta como una unidad de información que puede ser percibida de forma clara y precisa. Está dada por la selección y la organización de la información.
El primer párrafo es importante en la medida que introduce la acción y presenta los personajes. En este caso es un poco largo, lo que puede distraer la atención del lector. Es más correcto decir que el colegio “organizó” (en lugar de “hizo”) una excursión y “celebrar” es menos formal y más preciso que “conmemorar”. No es necesario repetir artículos determinativos (el, la, las, los), éstos pueden enumerarse y el texto se torna más concreto. Las preguntas que el chico hace al viejo pescador pueden colocarse en otro párrafo, mediante el uso de guiones largos, lo cual brinda agilidad tanto a la sintaxis como a la acción, además de que brinda carácter al viejo. Veamos si nos convencen las correcciones:
Fue durante una excursión que organizó el colegio para celebrar que terminábamos la primaria, cuando compré el pequeño búho con cuerpo azul, cabeza y patas blancas y ojos negros. No mide más 5 centímetros. Mis compañeros fueron a una tienda de artesanías y yo me quedé conversando con un viejo pescador que vendía esas figuras como de cera. Le pregunté si además de adorno servían para otra cosa y respondió:

 - Sí, estos buhitos predicen el tiempo. Ante mi mirada dudosa agregó:
 - Ya estoy viejo para salir a pescar, pero durante años tuve uno que era mi guía para saber si me embarcaba o no. ¿Ves el azul de su cuerpo? Pues bien, si permanece de ese color, el día estará soleado; si se torna color crema, estará nublado y si de plano se pone rosa pálido, anuncia tormenta.
El segundo párrafo también resulta largo, podemos cortar las ideas mediante el uso de puntos y seguido. Una vez que el chavo ha comprado y guardado el búho, utilizamos punto y aparte para separar la compra de la llegada a su casa. En cuanto a la pertinencia de las palabras, es más correcto decir que una figura es “artística” en lugar de “plástica”, que se presta a confusiones con un material.
Aunque no le creí del todo, la figura me resultó artística y graciosa. La compré a cambio de algunas monedas. Subimos al autobús y lo guardé.
En este párrafo, que se desprende del segundo y se convierte en uno nuevo, se narra lo que sucede cuando el chico llega a casa y la reacción de sus padres. En general, podemos rescatar el texto tal como está, sólo hay que suprimir la repetición de la palabra “papá” y colocar comas (llamadas parentéticas, pues funcionan como paréntesis) en la frase “tal como me había dicho el viejo”. Las variaciones de color del búho ya se mencionaron, sin embargo, pueden dejarse, puesto que son fundamentales para la intriga. Veamos los cambios:
Al llegar a casa, lo saqué de la mochila de viaje y se los regalé a mis padres. Mi mamá observó que estaba muy gracioso, pero que no quedaba con la decoración de la casa. A mi papá le encantó y más cuando le narré la historia que me habían contado sobre sus propiedades meteorológicas. Mi padre lo colocó en el marco de la ventana cerca de un escritorio donde “hacía cuentas” para los pagos de la casa. Pasaron los días y, tal como me había dicho el viejo pescador, el búho cambiaba de color de acuerdo al estado del tiempo por lo que azul equivalía a soleado, crema a nublado y rosa si iba a llover fuerte, o incluso podría tratarse de una amenaza de ciclón.
En este párrafo se desarrolla el nudo o conflicto: no sólo el papá enferma súbitamente, sino que hay una reacción no prevista en el color del búho, elemento esencial para la intriga. Aunque el uso de comas es correcto, el manejo de puntos y seguidos nos da la idea de cómo la madre y el hijo se enteran de la situación y “procesan” las emociones que están recibiendo, por lo que sustituiremos algunas comas por puntos y seguido, lo que además nos sirve para evitar la repetición de la conjunción “y”. A ver qué te parece esta organización de la información mediante el uso de puntuación:
Un día mi mamá llegó más temprano por mí a la escuela. Tenía la cara hinchada y los ojos llorosos. Nos fuimos directo al hospital pues a mi papá le había dado una embolia. No nos permitieron permanecer. De regreso a la casa me sorprendió que el búho estuviera de color azul marino. Confieso que me asusté. Casi no dormí.
El párrafo siguiente está redactado de manera adecuada. En cuanto a contenido, es importante, en virtud de que funciona como preámbulo al final de la narración y enfatiza el cambio de color del búho, en tanto el padre recupera su salud. Por lo tanto, queda igual. Sólo sustituimos la conjunción “y” por una coma.
Al día siguiente, antes de ir al hospital, me asomé al pequeño despacho y el búho estaba color crema, como siempre que los días iban a estar nublados. Por suerte, mi papá se salvó y se fue recuperando lentamente, estuvo bien por un tiempo.
Este último párrafo es en general correcto. Sobran algunas comas y se repite mucho la conjunción “y”. Podemos sustituir la coma que sigue al vocablo “reposo” por un punto y seguido, puesto que hay otra acción del padre, así como suprimir algunas conjunciones. Respecto al manejo de la intriga hacia un final sorpresivo, cabe señalar que, al morir el padre, el búho no se torna oscuro, sino “amarillo”, asunto que nos brinda una visión de lo que el autor consideró el valor de “una muerte tranquila”.
Hace dos semanas mi papá recayó, los médicos no nos dieron explicación y dijeron que requería reposo. Mi padre, sin embargo, se levantaba y arreglaba sus papeles, a ratos dormía y sonría. Ayer murió en la noche, en la mañana él me había asegurado que estaba tranquilo. El búho lleva casi dos días amarillo, un amarillo canario.
x No sobra recordar que un texto narrativo “cuenta hechos o historias acontecidas a sujetos, ya sea humanos (reales o personajes literarios), animales o cualquier otro ser antropomorfo, cosas u objetos; en él se presenta una concurrencia de sucesos (reales o fantásticos) y personas en un tiempo y espacio determinados. Dos elementos básicos de las narraciones son la acción (aunque sea mínima) encaminada a una transformación, y el interés que se produce gracias a la presencia de elementos que generan intriga (definida ésta como una serie de preguntas que porta el texto y a las cuales la narración termina dando respuesta)”. En este texto se cuenta una historia con personajes, en un tiempo y espacio determinados; la acción se centra en el cambio de colores del búho, que si bien originalmente estaba destinada a predecir los cambios meteorológicos, empieza a pronosticar cambios en la salud de uno de los personajes y en la familia en general. Se hace referencia a poderes ancestrales que algunos objetos relacionados con la fuerza de la naturaleza han demostrado tener desde tiempos primitivos. Vemos una progresión lineal: primero la adquisición el búho, acto seguido, sus propiedades se comprueban y finalmente, sus características van más allá de lo esperado y se involucran con las emociones humanas.
Créditos Ficha didáctica
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